Luciano Castro es uno de los grandes galanes de la televisión argentina, pero a veces su máxima popularidad parece darle una pésima pasada.
El actor ha confirmado la noticia que todos esperaban, principalmente, al reconocer que gracias a su éxito, ahora que aprovecha de las playas de Mar del Plata, donde realiza su nueva obra teatral, muchas personas se manifiestan demasiado "cariñosas". Aunque intentó disimularlo, Luciano Castro dejó en claro que aquella situación lo incomoda.
"No tengo ningún tabú, hice, hago y haré lo quiera hasta que fallezca, pero, muchas veces, me sucede, sobre todo aquí en la playa, que me hacen y me dicen cosas que me sorprenden", arrancó el artista.
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Y agregó detalles realmente impactantes: "Si yo hiciera lo que me hacen a mí, me denunciarían. No podría decir ni la mitad de las cosas que a mí me dicen".
Luciano Castro explicó, entonces, lo que debe soportar: "Me acarician. ¿Qué pasaría si yo hiciera lo mismo con una chica? ¡Me comería una denuncia de cabeza!".
El actor remarcó: "Por supuesto, estoy a favor del cambio sociocultural que vivimos y de los derechos ganados, pero, a mí me hacen cosas que a la inversa no se pueden hacer". Ahora todos esperan la reacción de Flor Vigna, la novia del galán, ante esta inesperada confesión. Recordemos que la pareja pasa el verano separada porque ella tiene una serie de conciertos por toda la costa, mientras él debe quedarse en Mar del Plata.
El éxito de su obra teatral
"El divorcio", la obra que encabeza Luciano Castro, es una de las más elegidas de este verano por los turistas que quieren relajarse.
Luciano Castro confesó: "El director cree en mí como actor, así que fue un desafío, me obligó a dejar de lado el envase y pensar más en el contenido".