Ricardo Montaner es uno de los artistas más queridos y con más trayectoria en la música latinoamericana. Durante los casi cuarenta años de carrera artística logró ganarse el cariño de miles de personas alrededor del mundo con su voz y con canciones que se convirtieron en clásicos de todas las épocas.
A raíz de su participación como coach en “La Voz Argentina”, la vida de Ricardo Montaner y la de su familia tomó mucha trascendencia en nuestro país. Más aún, después de la multitudinaria boda de su hijo Ricky con Stefi Roitman, que tuvo lugar en un ambiente caracterizado por el hermetismo.
Recientemente, el “líder” del “Clan Montaner”, brindó una entrevista exclusiva a Yordi Rosado para su canal de Youtube, y sorprendió con una llamativa confesión acerca de cómo comenzó su historia de amor con Marlene, con quien tuvo tres hijos: Mau, Ricky y Evaluna.
Cuando la vi, ya estaba casada. No fui a la iglesia, sino que a la fiesta y luego la dejé de ver como por seis meses, su matrimonio duró muy poco
Ricardo contó que la primera vez que vio a su actual pareja, fue precisamente en su propia boda. “Estaba separado, no divorciado de mi primera esposa y me mudé a Caracas, donde recibí una invitación para el casamiento de la hermana del presidente de la compañía discográfica donde yo estaba”, recordó.
“Cuando la vi, ya estaba casada. No fui a la iglesia, sino que a la fiesta y luego la dejé de ver como por seis meses, su matrimonio (perduró) muy poco”, contó, y agregó: “Yo la había visto una vez, entrar y salir de la disquera y me había quedado impactado, me gustó mucho”.
“Nos enamoramos desde el primer momento y aun hoy lo estamos. Mantenemos, especialmente, el enamoramiento, esa cosa que normalmente sucede desde la primera chispa hasta un tiempo después y que luego se posterga, se cambia o se modifica y pasa otra cosa”, finalizó.
La familia primero
Si hay algo que caracteriza a los Montaner, es justamente el cariño inconmensurable que los une y que queda en evidencia en todos los momentos que comparten juntos, en Buenos Aires y Miami. Esta particularidad hizo que se ganaran el apodo de “El Clan”.
Sin embargo, lejos de incomodarles esta definición, todos los integrantes de la familia se llenan de orgullo por ser reconocidos de esta manera ante el mundo. El amor y el cariño que los caracteriza, es uno de los motivos principales de la gran aceptación que tienen en su público.