Dante Gebel se ha convertido en uno de los personajes más queridos de la televisión argentina. Con su exitoso programa “La Divina Noche de Dante”, cada sábado sorprende a los televidentes con sus increíbles invitados. La jornada de ayer, Maju Lozano fue la gran invitada.
Dueña de un gran carisma, Maju Lozano logró cautivar al público de “La Divina Noche de Dante” gracias a su espontaneidad y empatía. En una interesante entrevista, la actriz le confesó a Dante Gebel momentos inéditos de sus comienzos en las pantallas televisivas.
Maju es actriz, productora y también conductora, sin embargo, esconde una profesión que nadie conocía. Resulta que su madre, le pidió que estudiara para ser maestra jardinera, profesión de la cual se recibió pero jamás llegó a ejercer, pues sus sueños estaban en otro lado.
“Una amiga me regaló el pasaje a Buenos Aires para festejar y yo quería conocer la TV. Frente a lo de mi amiga Valeria estaba lo que era ATC y para entrar dije que tenía un tío”.
Fue gracias al festejo de su graduación que, su amiga Valeria (Mazza) le regaló un pasaje a Buenos Aires para festejar y conocer la televisión, puesto que era su gran anhelo. Fue aquí, donde gracias a una serie de mentiras, la conductora logró quedar en un casting.
Fuente: (El Nueve).
Luego de esta insólita odisea, Maju Lozano quedó seleccionada en el casting para trabajar en “Poliladron”, pero lo peculiar de esta increíble historia, es que el papel que consiguió era el de la esposa fallecida de Gastón Portal: “Hice de persona fallecida con Gastón Portal”, develó.
Después de este cómico comienzo en las pantallas televisivas, la productora le relató al conductor de “La Divina Noche de Dante” que hizo de todo para llegar a donde está ahora. Desde ser la chica con los carteles de los diálogos, hasta llegar a guionar, no hay dudas se ganó el lugar que hoy tiene.
Fuente: (El Nueve).
Triste Historia
Luego de contar sus increíbles comienzos en la televisión argentina, Maju Lozano le confesó a Dante Gebel lo difícil que fueron los últimos años de vida de su padre y cómo le llegó a impactar la enfermedad que padecía, pues era algo que había afectado a toda la familia por igual.
“Él tenía psicosis maníaca depresiva, era muy agresivo, extremadamente agresivo, más de lo que me hubiera gustado. Tenía una depresión muy grande”, contaba con pesar Maju y le explicaba a Dante que, con el tiempo, ha logrado entender y perdonar a su padre.